Quería probar cómo iba eso de las copas menstruales y me hice con una IRISCUP, por lo que había leído en algunos blogs de opinión, se ajustaba a lo que buscaba en diseño y tamaño, además de contar con una buena relación calidad-precio.
Sí que es verdad que al principio te vienen a la mente las típicas objeciones… del tipo: hay que esterilizar la copa, parece algo complicada su colocación, la extracción tampoco se queda atrás.. o incluso su limpieza y mantenimiento… Pues bien chicas, nada más lejos de la realidad. Superado el pánico inicial… (todos sentimos cierto recelo ante la novedad), de verdad que es todo un descubrimiento! su manejo es muy sencillo, la limpieza no deja de ser algo rutinario y en comparación a las compresas o tampones, la copa es una opción mucho más higiénica y respetuosa con el Ph natural de tu zona íntima, evitando posibles infecciones o molestos picores durante esos días de por sí bastante incómodos ya…
Sólo me arrepiento de no haberla probado antes! Muy recomendable!!!
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